El trabajo asistencial del Hospital Aita Menni en justicia terapéutica se ha dado a conocer en el Congreso Europeo “Justicia Restaurativa y Terapéutica: hacia innovadores modelos de Justicia”, celebrado del 16 al 18 de junio en el Palacio de Congresos del Kursaal de Donostia-San Sebastián. Porque existen otras formas de aplicar la Justicia más allá del tradicional modelo punitivo, que castiga apartando de la sociedad a las personas que han cometido delitos.
Colaboración entre los sistemas judicial, sanitario y social
En este encuentro internacional, prestigiosos expertos abordaron los nuevos conceptos de justicia, más humanos. La justicia terapéutica conjuga la aplicación de la ley y la asistencia a la salud mental. Desde el mundo de la judicatura se apunta como la manera más adecuada de afrontar situaciones penales en personas con adicciones o trastornos mentales.
Dentro de los cursos de verano de la UPV-EHU, el congreso fue organizado por el Grupo Europeo de Magistrados por la Mediación (GEMME) y el Instituto Vasco de Criminología-Kriminologiaren Euskal Institutua (IVAC-KREI) con la colaboración del Gobierno Vasco y Hermanas Hospitalarias, entre otras instituciones. En este marco, durante la tarde del día 17, el director gerente del HAM, Mikel Tellaeche, y el responsable de la Unidad de Psiquiatría Legal, Iñaki Madariaga, impartieron el taller “Justicia terapéutica en la ejecución penal”.
Reto: la continuidad asistencial
Tras presentar Aita Menni a los asistentes y subrayar que en sus distintos centros reciben tratamiento y asistencia alrededor de 1.500 personas cada día, Mikel Tellaeche abogó por la adaptación de dispositivos a nuevas realidades sociales e incidió en la importancia de la “continuidad asistencial como reto presente y futuro”.
Para que puede aplicarse la justicia terapéutica han de colaborar los sistemas de justicia, salud y social. Y es ahí donde juega un papel importante Aita Menni. A finales de 2013, se inauguró en el hospital la primera Unidad de Psiquiatría Legal (UPL) de España para personas con enfermedad psiquiátrica implicadas en procesos judiciales como consecuencia de actos derivados de su propia salud mental. Desde entonces, el trabajo del HAM es un ejemplo avanzado de cómo, tras el cumplimiento de una medida de seguridad, se articula la integración de estos pacientes al sistema de salud mental según sus necesidades asistenciales.
Aita Menni, una magnífica referencia
La aplicación de la justicia terapéutica hace posible la colaboración de profesionales de la salud, de la justicia y la reinserción social. La UPL es una novedad asistencial en nuestro entorno; en sus dos años y medio de funcionamiento, ha atendido a 24 personas con enfermedades mentales graves implicadas en actos delictivos como consecuencia de su psicopatología.
Se estima que aproximadamente un 25% de la población reclusa presenta algún tipo de enfermedad psiquiátrica. En España hay en la actualidad aproximadamente 470 enfermos psiquiátricos ingresados en dos hospitales psiquiátrico-penitenciarios: Fontcalent (Alicante) y Sevilla. En estos centros el modelo de funcionamiento es próximo al propio de la cárcel mientras que en nuestra UPL el modelo funcionalmente es más cercano a de un hospital psiquiátrico.
“En la Unidad, hasta el momento, no hemos tenido ningún problema en el manejo de pacientes. La prueba es que la atiende única y exclusivamente personal sanitario. Es verdad que son profesionales con mucha experiencia en el medio hospitalario. Pero no hemos tenido que recurrir a personal de seguridad”, relata su responsable. Bien es cierto que las propias instalaciones han sido configuradas para dar respuesta a la seguridad de estos pacientes y personas que les atienden. Están dotadas de sistemas concretos de accesos y perímetros de seguridad, sensores metálicos, cámaras de seguridad diurnas y nocturnas, etc.
“El modelo penitenciario clásico se va quedando al margen en los países judicialmente más desarrollados”, explica Iñaki Madariaga. Hay que ir dando pasos en esta línea de intervención e “indudablemente la UPL de Aita Menni es una magnífica referencia. Si hay algo que representa la justicia terapéutica es nuestra Unidad”. El avance en el Estado Español se producirá según se vayan conectando fondos sanitarios y de justicia.
¿Cómo son los pacientes de la UPL?
• Personas con enfermedad mental grave
• Que como consecuencia de su enfermedad mental se han visto implicadas en actos delictivos graves y con significativa repercusión legal
• La justicia ha estimado que esta persona no es responsable (en mayor o menor medida) de sus actos
La vocación del Hospital Aita Menni es ir creciendo en este tipo de dispositivos. Y la Unidad “pasa de las palabras a los hechos” ampliando. Con las obras que se están llevando a cabo en el hospital, su capacidad pasará en unos meses de las 10 plazas mixtas disponibles a ser el doble.