Una representación de todos nuestros centros cierra en el Hospital Aita Menni los actos de su 125 aniversario

Un amplio grupo de personas, posando junto a un busto en piedra de San Benito Menni

Tras un año entero en el que se han llevado a cabo un buen número de actividades conmemorativas, el pasado día 13 se dieron por finalizados los actos del 125 aniversario de la fundación de la Casa de Salud de Santa Águeda, la semilla de la que surgiría en los años 80 el Hospital Aita Menni.

Para la ocasión, se desplazaron hasta Gesalibar (Mondragón) un buen número de colaboradores y colaboradoras de los centros de Hermanas Hospitalarias en Gipuzkoa y Bizkaia, quienes acompañaron a las cinco hermanas de nuestra Comunidad, al Consejo de Dirección de Hermanas Hospitalarias Aita Menni y a un amplio grupo de pacientes en la eucaristía celebrada en la iglesia del Hospital, que fue oficiada por el vicario general de la Diócesis de San Sebastián, Mikel Aranguren, y el párroco del Hospital, Horacio Argárate.

Tanto Mikel Aranguren en su homilía como en su alocución previa Sor Isabel Martínez, superiora de Hermanas Hospitalarias Aita Menni, recordaron el papel de San Benito Menni como fundador de la Congregación y del Hospital, y resaltaron la importancia del trabajo que llevan a cabo colaboradores y colaboradoras en la atención de las personas más desfavorecidas.

Vista de una iglesia durante una eucaristía, con las personas de espaldas y el altar al fondo

Tras la liturgia de la palabra, pacientes, colaboradoras y voluntarias fueron los encargados de presentar las ofrendas, que simbolizaban todos los centros y las líneas asistenciales en las que Hermanas Hospitalarias desarrolla su labor: psiquiatría y salud mental, discapacidad intelectual, daño cerebral, personas mayores y ayudas técnicas a la discapacidad. Atravesaron el pasillo central hacia el altar el logotipo del 125 aniversario, un ramo de flores realizado por pacientes, un cuadro con las imágenes de un grupo de superioras que ha tenido Hermanas Hospitalarias Aita Menni y un candil encendido, que quedaron en el altar hasta el término de la eucaristía.

Un aurresku sirvió como despedida, y a continuación, hermanas, colaboradoras y colaboradores se situaron en torno al busto de San Benito Menni y posaron para el recuerdo, representando a todo el equipo de Hermanas Hospitalarias Aita Menni en la clausura de una celebración tan importante como ha sido para nuestra Institución el 125 aniversario del comienzo de su actividad en el País Vasco.

Tras ello, todo el grupo compartió un aperitivo en la cafetería del Hospital.