Una vez por semana se dirigen en autobús a lugares cercanos, acompañados por diferente personal del equipo terapéutico, que se encarga de supervisar y dirigir la actividad. Por lo general, la actividad se organiza de acuerdo al siguiente programa:
• Todo el mundo llega a la hora habitual al Hospital de Día.
• Antes de salir, se comentan los datos recogidos sobre el lugar que se va a visitar.
• El grupo sale en autobús y se desplaza hasta el lugar seleccionado, donde visita los lugares típicos de la zona, se hacen fotografías. Todos comentan distintas circunstancias relacionadas con el lugar visitado, etc.
• Tras un descanso para reponer energías: café, refresco, pintxo…, se regresa al centro.
• Al día siguiente, en el Hospital de Día se rememora la excursión realizada y seguidamente se empieza a preparar la siguiente.
El grupo en el mirador de Urkiola, en el santuario y cumpliendo el ritual de dar vueltas a la piedra para encontrar novio o novia. Abajo, de excursión en Loiola
“Salir de excursión nos agrada a todos porque para nosotros es un día diferente en el que tenemos la oportunidad de conocer lugares nuevos, nos relacionamos entre nosotros de forma amigable y, en algunos casos, supone el único momento en que salimos de nuestra rutina diaria”, comentan desde el centro, donde también nos recuerdan que realizan otras actividades, como la decoración de bandejas utilizando la técnica de la cartapesta o la elaboración de distintas recetas de cocina para degustar posteriormente entre todos.
Taller de cocina y decoración de bandejas con la técnica de la cartapesta
En el Hospital de Día de Arrasate se desarrolla un programa terapéutico rehabilitador dirigido a personas con enfermedad mental que se encuentran en una fase de la enfermedad en que, aunque no se precisa un internamiento psiquiátrico, sigue siendo necesario un apoyo terapéutico intensivo con el fin de evitar posibles recaídas y favorecer la integración en la comunidad. La asistencia sanitaria que los pacientes reciben es, generalmente, de carácter voluntario y en régimen ambulatorio, posibilitando de este modo que el paciente reciba su tratamiento sin desvincularse de su entorno familiar y social.
