Hablamos de gestión social en el XII Congreso Nacional Lares, que aglutina a las residencias la atención a la dependencia
‘La gestión para el bien común’ fue el lema escogido para la reunión celebrada en Toledo
Cerca de 600 profesionales de la atención a personas mayores, dependientes, con discapacidad o en riesgo de exclusión social se han reunido en Toledo, ciudad donde este año se ha celebrado el Congreso Lares. Aita Menni ha estado presente en esta duodécima edición junto con otras muchas instituciones de bienes y servicios vinculadas a la atención a la dependencia.
“La gestión social de nuestras empresas. Hacia un futuro sociosanitario” fue el título de la ponencia del director médico de Aita Menni, el doctor José Ignacio Quemada, en este XII Congreso de la Federación Lares celebrado los días 19, 20 y 21 de octubre.
Nuevas vías de pensamiento y reflexión
La organización de este este encuentro anunció las ponencias de José Ignacio Quemada y Pedro Jaramillo Rivas, doctor en Teología Bíblica y delegado episcopal de Cáritas Guatemala, como las dos principales, aportaciones profesionales externas a Lares que abren “nuevas vías de pensamiento y reflexión”. El comité científico se decantó por estos ponentes “avalados tanto por su trayectoria profesional como por su paralelismo con la misión, visión y valores de Lares”.
Bajo el lema ‘La gestión para el bien común’, el programa contó con la participación de otros destacados profesionales del sector que compartieron experiencias y analizaron la gestión en todas sus áreas: gestionar para las personas y sus cuidados; gestionar para y con las personas que cuidan; gestionar para y con la sociedad; gestionar en el entorno y gestionar recursos.
En su ponencia, el doctor Quemada afirmó que la sanidad se está redefiniendo; se está reorientando hacia el tratamiento solo de las patologías más agudas, hacia los procesos quirúrgicos, hacia las consultas de atención primaria o especializada y hacia las investigaciones tecnológicas más sofisticadas. Las enfermedades infecciosas han dado paso a las enfermedades de curso crónico como problema más prevalente en nuestra sociedad. Las demencias, los ictus o las enfermedades mentales graves son buenos ejemplos. En el tránsito a la atención social estos problemas han sido recogidos bajo el paraguas de la “dependencia”, y a partir de ahí se ha generado legislación. Mientras, razones asociadas al envejecimiento de la población, la contención de gasto y los recursos limitados “plantean retos sanitarios y sociales”.
El espacio sociosanitario, un concepto virtual
Los servicios sociales están empezando a asumir una responsabilidad creciente en la atención a las enfermedades crónicas, dependencia en términos sociales. Pero no está habiendo una transferencia automática de recursos desde lo sanitario a lo social, faltan modelos de atención y coordinación entre sistemas… “El reconocimiento de la alta complejidad de los cuidados exige de una colaboración entre los profesionales sanitarios y sociales que ha de consolidarse en el espacio sociosanitario; de momento, y con alguna excepción, éste es un concepto más virtual que real; en general está poco dotado, escasamente planificado y apenas desarrollado”, continuó Quemada. Según él, las empresas y agentes que se han dedicado a tratar personas con enfermedades crónicas son agentes llamados a colaborar en el diseño esos espacios sociales y sociosanitarios.
El Hospital Aita Menni – por su trayectoria en la prestación de servicios de calidad para personas con enfermedad mental grave, discapacidad intelectual con alteraciones de conducta, demencias complejas y personas con daño cerebral-, está inmerso en un trabajo paralelo con interlocutores sanitarios y sociales, lo cual le brinda la oportunidad de proponer modelos futuros de atención y de liderarlos.
