Cofundadora de la congregación de las Hermanas Hospitalarias, junto con Mª Angustias Giménez y bajo las indicaciones del padre Benito Menni, Maria Josefa Recio fue una mujer muy solidaria y entregada que se convirtió en la primera Superiora general. Murió a consecuencia de los golpes recibidos de una enferma mental y su ejemplo de vida permanece vivo en la Congregación. El 8 de febrero de 2011, el congreso de teólogos reunido en Roma la declaró “venerable”. La Fundación Mª Josefa Recio, cuyo objetivo es ayudar y defender los intereses de personas con discapacidad psíquica o enfermedad mental, forma parte de su legado.
Coincidiendo el aniversario de la muerte de Mª Josefa Recio, el 30 de octubre se celebró el Día del Voluntario Hospitalario. Hubo en el Hospital Aita Menni de Arrasate misa, comida y baile. Participaron en la fiesta alrededor de cien personas, entre ellas 50 voluntarios de los centros de Gesalibar, Txurdinaga y Durango. También acudieron pacientes y hermanas hospitalarias de Gesalibar y Deusto. Fue un día de encuentro y celebración.
Egoitz Zabala, responsable de Voluntariado del Hospital Aita Menni, recuerda que actualmente 75 personas realizan labores como voluntarias, 52 en el Hospital Aita Menni y 23 entre los centros de Durango y Txurdinaga.