Autismo y confinamiento
El confinamiento está resultando duro en líneas generales, pero lo es todavía más en el caso de personas con diversidad funcional o discapacidad. En concreto, hoy nos acordamos de las personas con autismo.
Según nos explica, Macarena Aspiunza, psicóloga de la Unidad de Discapacidad Intelectual y Trastornos del Espectro Autista con Alteraciones de Conducta, las personas afectadas por TEA (trastornos del espectro autista) suelen ser personas que presentan dificultades para adaptarse a los cambios en sus rutinas diarias, rigidez cognitiva, falta de comprensión y déficits a la hora de expresar sus sentimientos o sus necesidades. En este contexto, suele ser habitual que ante pequeños cambios se produzca un aumento de los niveles de estrés y que esto derive en la aparición o aumento de alteraciones comportamentales como:
· Conductas negativistas y desafiantes, que lleven a contravenir las medidas establecidas.
· Presentar dificultades significativas de auto-regulación, que provoquen un incremento o intensificación de auto y/o heteroagresiones a figuras principales de apoyo.
· Experimentar un agravamiento de condiciones comórbidas de salud mental (ansiedad, depresión…), que puedan poner en riesgo su integridad física.
La vulnerabilidad de dicho colectivo ha sido reconocida por el Ministerio de Sanidad, quien ha dictado una instrucción, publicada en el BOE núm. 76, de 20 de marzo, y que habilita explícitamente “a las personas con discapacidad, que tengan alteraciones conductuales, como por ejemplo personas con diagnóstico de espectro autista y conductas disruptivas, el cual se vea agravado por la situación de confinamiento derivada de la declaración del estado de alarma, y a un acompañante, a circular por las vías de uso público, siempre y cuando se respeten las medidas necesarias para evitar el contagio«.
Así mismo, se pueden adoptar otras medidas complementarias para favorecer la regulación emocional de las personas con TEA. Desde el Hospital Aita Menni queremos dar algunas recomendaciones que pueden facilitar a familias y personas de apoyo en el manejo de las alteraciones de conducta de personas con TEA en las circunstancias actuales:
· Intentar seguir una misma estructura y horario con apoyo de material visual como imágenes o pictogramas.
· Mantener el horario habitual, respetando los ritmos de sueño y alimentación.
· Realizar ejercicios que conlleven movimiento, puede ayudar a reducir los niveles de ansiedad.
· Favorecer el uso de canales sensoriales que favorezcan la regulación emocional, a través de estimulación sensorial y adaptando el estímulo al perfil sensorial de cada persona.
· Llevar a cabo actividades de corta duración y variadas, siempre ajustadas a su rutina.
· Facilitar el uso de dispositivos digitales como elemento de ocio y de interacción con figuras de referencia.
En este enlace os dejamos una referencia de un libro corto, apto para descarga, escrito por la psicóloga Manuela Molina, que puede ayudar a explicar y entender a personas con TEA qué es el coronavirus.