Bajo el título ‘Abriendo los ojos a la globalidad de la Institución’ y partiendo de la frase «Lo que no se conoce no se ama», que impulsa nuestro Marco de Identidad, Egoitz Zabala impartió el día 21 una sesión de formación para personas colaboradoras en el Hospital Aita Menni sobre la propia institución Hermanas Hospitalarias. El responsable de Pastoral, Voluntariado y Proyectos Sociales comenzó con los ‘números de la Hospitalidad’: la congregación Hermanas Hospitalarias está presente en 25 países, con más de 17.300 plazas sanitarias y sociales, y cerca de 2 millones de personas atendidas anualmente. Este trabajo se realiza gracias a la entrega humana y profesional de más de 1.000 hermanas, 11.100 colaboradores y numerosas personas voluntarias.
Las personas que trabajan en Aita Menni saben que nuestra Institución, de confesionalidad católica y sin ánimo de lucro, trabaja en favor de las personas con enfermedad mental, discapacidad intelectual, daño cerebral y con otras necesidades (cuidados paliativos, medicina general…); y que los principios de nuestro Modelo Hospitalario responden a la misión, visión y valores de la Hospitalidad iniciada en 1881 en Ciempozuelos por San Benito Menni, donde, junto con María Josefa Recio y María Angustias Giménez, fundara la congregación de Hermanas Hospitalarias.
Actualmente Hermanas Hospitalarias gestiona más de 370 centros repartidos por África, Asia, Latinoamérica y Europa. La organización se extiende geográficamente tanto que las propias personas que trabajan en nuestro hospital a veces desconocen dónde se ubican sus dispositivos. Egoitz Zabala realizó un somero repaso por el mapa de Hermanas Hospitalarias en el País Vasco, que no deja de crecer.
La organización interna de la propia Institución, con las actuales provincias, ocupó buena parte de la disertación. Los centros del País Vasco pertenecen a la Provincia de España, al igual, curiosamente, que los de Guinea Ecuatorial y Vietnam. La hermana Monse Esparza, superiora de la Comunidad de Hermanas Hospitalarias en Mondragón, colaboró a la hora de explicar la forma en que se eligen y renuevan los distintos órganos de dirección, así como la limitación de mandatos y sus excepciones.
De una forma amena, la exposición dejó bien patente que Hermanas Hospitalarias es una institución que se adapta a los tiempos y quiere responder a las necesidades de la sociedad del siglo XXI. La interculturalidad, entendida como la problemática social, de salud y salud mental y su asistencia en la población migrante, es uno de los aspectos que más preocupa en estos momentos a la organización, subrayó Egoitz Zabala. La Institución quiere potenciar en el sentido asistencial el trabajo en red y el intercambio de experiencias entre centros, incluidos de distintos países, además de la participación del voluntariado.